CONCIERTO DE AÑO NUEVO
Rubias como la nieve,
con guirnaldas de flores en el pelo
y cintas de Moldavia,
bajo los altos techos estucados
y el dorado fulgor de las cristalerías,
las princesas de Austria
bailan en los espejos,
caderas de champán, ojos de escarcha.
Danzarinas
sobre el entarimado sueño
de un salón imperial,
abierto al mar del hielo
cuando cruje la seda y arde el vals.
Al fondo, tras la bruma, una negra berlina,
los lóbregos caballos no se van.
2 comentarios:
Aplausos al concierto. ¡Y muy feliz 2012!
Feliz año, Olga.
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