Capítulo II: aquí.
Capítulo I: aquí.
El programa de mano anunciaba
como entremés previo a la obra un número de magia a cargo de un reconocido taumaturgo uruguayo de improbable nombre alemán. Antes de que se apagaran las luces una niebla verdosa empezó a fluir
desde las tablas acompañada de una fanfarria lúgubre. Luego se hizo la
oscuridad y el silencio hasta que por fin surgió de entre los vapores fosforescentes
un hombre de corta estatura y rostro aindiado, vestido con levita negra y
tocado con sombrero de copa y monóculo, que se atusaba una perilla lacia al
tiempo que con un esforzado acento germánico ponderaba las virtudes teosóficas del
galvanismo y sus numerosas aplicaciones prácticas, de la telepatía a la
telequinesia, según él hoy acreditadas sin duda ya por la ciencia. La electricidad, decía,
a cuyo increíble desarrollo debía la humanidad su actual prosperidad, era aún
una energía en pañales. Los maravillosos experimentos e inventos de Edison y
Tesla, de los que sin duda el distinguido público habría tenido ocasión de
disfrutar en los pabellones de la Exposición, palidecerían en breve ante las
nuevas posibilidades que se atisbaban de la fusión de los fluidos mentales y
las corrientes magnéticas. Y para demostrarlo invitaba a la dama del vestido
verde sentada en la cuarta fila a subir al estrado para una sesión práctica.
A mí me pareció reconocer en ella a la enigmática acompañante del fundador de
la Legión, pero debido a mi corta vista no estaba en condiciones de asegurarlo.
Tras una fingida turbación inicial y el preceptivo aplauso alentador de palcos
y platea, la extraña señorita, que estaba sola en el teatro, subió al escenario,
donde dos ayudantes del nigromante, emplumados y con la cara y el cuerpo
pintados a la manera de las tribus precolombinas, habían colocado un artefacto
semejante a un diván, pero puesto en vertical y cruzado de bandas de caucho,
conectado a lo que semejaba una generador en el que burbujeaba un agua violácea
acribillada por continuos chispazos.
CONTINUARÁ...
Teatro de la Exposición, hoy Lope de Vega, fotografía usurpada a sevilla5.com |
Círculo op. 91 Turina Trío Arbós
No hay comentarios:
Publicar un comentario