¿Y dime, cómo Es? ¿Lleva un triángulo en la
frente y zapatillas de deporte? ¿O es Su rostro
adusto y oscuro, pero dulce, como un icono mal
lijado en las meriendas de julio? ¿Está Su carne
rota y desmembrada, vacía de carcoma, pero
radiante de luz? ¿Y cómo es el Espíritu, tiene
sabor a menta, trazas de pictolín? ¿Y Ella? ¿Es
una niña de Sevilla o una extremeña lozana?
¿Se parece a tu madre, tiene arrugas de amor?
¿Sigue loco aquel joven de los frescos de Giotto,
cantándole a la Luna, vestido como tú? ¿Es
pontonero o es místico, te has peleado ya con él?
¿Y cómo es el silencio de su amiga del alma,
tan clara y transparente como el agua que baja
por la Sierra de Gata, y que llora por ti? ¿Qué
dicen los arcángeles, los coros olorosos, de las
locas guitarras que cantan sin descanso y que
buscan a Dios por el monte pelado?
Tú nunca dabas una respuesta suave, pero
sabías decir exacta la pregunta. Ahora que tus
ojos de ardilla vivaracha galopan por las ramas
de los pinos más altos, ahora que tus manos de
niño juguetón abrazan otra vez encinas portentosas
y hay un huerto, una viña y una ermita de luz.
Ahora que tenemos todo el tiempo del mundo
y podemos hablar como siempre hemos hecho,
me pienso aprovechar. Cuenta, dime, Pacífico,
empecemos de nuevo ¿Por qué te llaman Pachi?
Tengo otra vez diez años ¿qué es lo que estás
apuntando en la libreta de hule? ¿Cuándo dices
que sale el autobús? Macuto o similar, lo hablaré
con mis padres. ¿De verdad puedo ir al campamento?
jueves, 28 de agosto de 2008
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10 comentarios:
Gracias amigo.
Jose Rivero
¿Te he dicho alguna vez que si tu santa madre no te hubiera parido habría sido imposible inventarte?
¿Te ha dicho alguien, alguna vez, que a la grandeza de lo que dices se suma la pericia del cómo lo dices?
Por descubrirte te lo digo.
Gracias por el regalo, amigo.
sublime.
:)
te agrego, que no sabía de la existencia de este blog.
Gracias, Dani, José, Rosa, pero sobre todo, gracias Pacífico.
,,,
Brillante, como siempre, José María.
Creo que es el modo más original que he encontrado de expresar un sentimiento que muchos compartimos. Y las dudas que nos asaltan.
Un abrazo fuerte
Al leerte me he sentido instantáneamente parte de una corriente de emoción compartida.
Gracias. Un fuerte abrazo.
Gracias a Pacífico, Carlos.
Os dejó ese hombre, sombras y luz, un venero de sentimientos que no se agota ni con la distancia ni con el tiempo. Su esencia, impronta en vuestras almas, sagrado tatuaje, os acompañará por siempre. Paz y Amor.
Muchas gracias, Carmen.
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